Burocracia y apatía en casos de insuficiencia renal en la Sierra
Por BGG
Jalpan de Serra, Qro.- Sin aviso, al menos a los pacientes, fue realizado el cambio de proveedor de la solución marca Pisa utilizada para la diálisis peritoneal ambulatoria por parte de la Secretaría de Salud. Así fue puesto en evidencia desde hace algunas semanas cuando familiares de pacientes con éste tipo de diagnóstico, comenzaron a solicitar apoyo en redes sociales tras la escasez de la solución, debido principalmente a que no era compatible con el catéter permanente que utilizaban los pacientes que realizaban este tratamiento en sus domicilios. De acuerdo con información de los especialistas del Hospital General en Jalpan de Serra (HGJS), la conexión de la nueva solución adquirida por la SESEQ de marca Baxter, simplemente -no era compatible con la marca Pisa-.
El cambio de la solución aunado aparentemente a la falta de cercanía por parte de los familiares con el personal del Hospital General, habría contribuido incluso a que por más de cinco semanas los enfermos no tuvieran al alcance la solución y tampoco fueran notificados de este cambio debido a que, al ser diferentes las marcas se debería proporcionar además, una capacitación para realizar el delicado procedimiento en sus viviendas.
La demora en la llegada de dicha capacitación, así como la atención por parte de la instancia de salud en buscar a los pacientes o sus familiares para informar del cambio, agravó la salud de varios de los pacientes, uno de los cuales, falleció en el proceso de transición de la llegada de la nueva solución, otros más, quienes tuvieron la posibilidad de acceder a la compra de la solución correspondiente a su catéter, así lo hicieron.
Pero también existen casos como el de Sebastián de 68 años de edad, que sus condiciones de salud, económicas y geográficas, le impidieron acceder a ellas, por lo que tras cinco semanas sin realizarse el procedimiento en casa, su salud se ha deteriorado, y hasta el momento de acudir a su domicilio para saber su historia, -no contaba con movilidad en sus extremidades inferiores y tenía el estómago abultado. Tan sólo un día antes, al intentar caminar para ir al baño, “simplemente se cayó”, relató en ese momento la mamá de Sebastián, una adulta de 85 años de edad, quien dijo sentirse “triste por ver a su hijito así”.
Pese a todo, el Señor Sebastián fue citado el viernes 21 de octubre, para recibir el tratamiento, brindar a su familia, la capacitación para el uso de la nueva marca de solución ahora Baxter.
Por el contrario, Don Floriberto de 61 años de edad, no alcanzó a ver este momento. Su caso igualmente fue conocido en redes sociales, también padecía insuficiencia renal crónica, por lo que pidieron apoyo dada su situación económica, la lejanía de su comunidad y su ya deteriorada condición de salud, el caso era el mismo, no contaban con bolsas en el Hospital y deberían adquirirlas ellos mismos.
La demora, la falta de información y cercanía de ambos; tanto familiares de estos pacientes, así como de la institución quien tiene la relación de una decena de pacientes que llevan a cabo estos procedimientos en casa, no se dió y contribuyó a que las condiciones de salud de los enfermos decayera. Lo cierto es, que el cambio de proveedores de los insumos para éstos delicados procedimientos tardó más de un mes en llegar a la Sierra Gorda, en dónde algunos sabían, otros no preguntaron y varios más, viven el retraso institucional y burocrático.