Actualmente, el siniestro que se registra en las inmediaciones de Pinal de Amoles y Atarjea, Guanajuato, pone en predicamento a las diferentes corporaciones que se enfocan al combate de incendios, como la CONAFOR, CONANP, SEDEA, SEDENA y Protección Civil; así como un gran número de voluntarios, tanto queretanos, como guanajuatenses.

Se estima que son ya cerca de 2 mil hectáreas las devastadas.

Cabe recordar que esta semana, del 10 al 13 de abril, en San Antonio Tancoyol, perteneciente al municipio de Jalpan de Serra, el fuego consumió un total de 1,061 hectáreas; en donde afortunadamente con el apoyo de decenas de voluntarios y diferentes brigadas de los tres niveles de gobierno, lograron controlarlo.  

Asimismo, en Guayabos de Jalpan, el 13 de abril un total de 2.5 hectáreas pastizal fueron arrasadas por un pequeño incendio.  

También se registraron dos conatos de incendio en la colonia Santa Inés y Colosio, en cabecera municipal jalpense, los cuales fueron controlados gracias a la oportuna intervención de los Bomberos de Jalpan, comandados por el Profr. Ángel Omaña García.

En Landa de Matamoros esta semana se registraron dos siniestros, uno en el Malpaís y otro en Palo Verde, en los que los habitantes de estas comunidades y con la oportuna intervención de los Bomberos de La Lagunita, evitaron que éstos se propagaran y en su conjunto se consumiera solamente un aproximado de 1.5 hectáreas.

También es preciso recordar que hace 3 semanas, en Concá, Arroyo Seco, un voraz incendio en menos de 24 horas devoró alrededor de 900 hectáreas de matorral.

Los incendios forestales están incesantes, por lo que se pide a la población evitar me quemas agrícolas que en muchos de los casos se les salen de control y son éstas las principales causas de los incendios registrados en esta zona norte del Estado de Querétaro.