Pinal de Amoles, Qro.- “El futuro del agua dentro de la Reserva de la Biosfera Sierra Gorda requiere de voluntad y participación de población y gobierno”, fueron las palabras vertidas durante el inicio del 1er Foro del Agua encabezado por la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) en la delegación de Ahuacatlán de Guadalupe en Pinal de Amoles.
En su intervención, la Rectora de la máxima casa de estudios la UAQ, Teresa García Gasca, refirió que el foro permite sumar voluntades y hacer equipo. “No es un proyecto de la UAQ, es un tema que importa a todos. Si bien, es importante el tema económico entorno a al agua, la investigación y las alianzas, así como el trabajo con los gobiernos, organizaciones sociales y la sociedad, debe ser prioritario para encontrar coincidencias, porque se necesita una mejor gestión del agua y buscar opciones surgidas desde la experiencia y voluntad de todos”.
Por su parte, Lupita Ramírez, presidente municipal de Pinal de Amoles, reconoció el interés de parte de la CONANP, la UAQ, Organizaciones Civiles, así como de las dependencias quienes han sido testigos de los efectos que ha dejado el cambio climático que generó sequía y condiciones complejas, y los problemas sociales ligados a la falta de agua.
El resto de los representantes de los municipios serranos, hablaron de la importancia de crear infraestructura que permita la conservación de agua, hacer un uso adecuado de los espacios que ya cuentan con fuentes naturales de este líquido y que son esenciales para la población, así como crear una conciencia en la población para fortalecer las iniciativas y propuestas surgidas desde la academia, expertos y la misma población.
La Directora de la Reserva de la Biosfera Sierra Gorda, Guadalupe Sánchez Weinmann, aseguró que el foro servirá para generar el dialogo que permita generar espacios de diálogo donde el objetivo común sea el agua, “porque es el principal objeto de protección de la reserva”.
Finamente tras varias ponencias fue firmado un convenio interinstitucional que compromete a que todos los integrantes de los tres niveles de gobierno y de la sociedad civil, a cumplir con una agenda que permita la conservación de los entornos y sobre todo el agua en la Sierra Gorda.