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Hay una familia desamparada

  • En la comunidad pinalense de Mabi de los Reyes una mujer lucha día a día por sacar adelante a sus 3 hijos.
  • Su esposo sufrió un accidente y se fracturó la columna; está postrado en una cama.

La comunidad de Mabi de los Reyes es una localidad pinalense en la que existen numerosas familias con grandes carencias; sin embargo, en particular, ahí habita una familia que, por desgracia del destino, cada día tienen que luchar por su sobrevivencia.

Se trata de doña Doralicia Herrera Mejía, quien tiene que ingeniárselas para poder alimentar a sus 3 hijos y a su esposo Cipriano Mendoza que, tras sufrir un accidente en el que se fracturó la columna, se encuentra postrado en una cama.

“No tengo recursos para sus pañales y medicamentos. Pedí ayuda a la Presidencia pero no me han apoyado”, menciona con tristeza doña Doralicia, quien es el pilar fundamental de la familia conformada por su esposo y sus hijos de 6, 7 y 14 años de edad.

Ellos ni siquiera cuentan con casa propia, por lo que cerca de un depósito de agua, a base de madera, construyeron un par de espacios para cocinar y aislarse parcialmente de las inclemencias del clima.

Por no tener acceso al internet, no pudo solicitar los apoyos alimentarios que ha estado otorgando el Gobierno del Estado, por lo que solicita la ayuda de las personas de buena voluntad que gusten ayudarles con ropa, despensa o material de construcción.

Cabe hacer mención que el día de ayer jueves 11 de junio, el C. Manuel Ramírez, acudió a entregarles despensas y ropa, lo cual les será de gran ayuda.