- Múltiples atractivos turísticos, artesanales y culinarios ofrece a los visitantes
- Es un lugar lleno de magia, atracciones centenarias y una calidez humana
Visitar Villa Progreso, una de las dos delegaciones municipales de Ezequiel Montes, es un inevitable encuentro con la historia, las tradiciones y una cultura llena de riqueza artesanal, culinaria, turística y mucho más. Estar aquí es conocer las raíces de una cultura que se niega a morir y que hoy en pleno siglo XXI, sigue ofreciéndonos lo más extraordinario que un pueblo puede dar a los visitantes, la hospitalidad, la alegría y sus inigualables artesanías.
Apoyados e impulsados desde hace varios años por Carlos Montes García, quien como presidente municipal en el período 2003-2006 fue un soporte permanente para que decenas de artesanos vieran florecer su actividad, hoy como director regional de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario mantiene esa firme convicción de apoyo a los artesanos, hombres, mujeres y jóvenes de Villa Progreso.
Durante una visita a esta extraordinaria comunidad de raíces otomíes, conocimos con mucho agrado la calidad de las artesanías elaboradas con el ixtle, materia prima que obtienen de las pencas del maguey, para elaborar los más diversos artículos, desde bolsas y carteras para dama, hasta artículos ornamentales y otros de uso cotidiano en el hogar, destacando los tradicionales estropajos, las bolsas para el mandado y muchos más.
También conocimos la elaboración de mermeladas con productos de la región como el garambullo, la tuna, el xoconoxtle y una amplia variedad de frutas de la zona, que gracias a diversos cursos que les ha proporcionado la SEDEA a las mujeres y los hombres, hoy les permite aprovechar esos productos para transformarlos en auténticos postres regionales.
Y qué decir de su arte culinario, los habitantes de Villa Progreso son dueños de un particular estilo para la elaboración de comidas verdaderamente exquisitas, entre ellos el conejo en múltiples presentaciones, gracias a los cursos de la SEDEA han aprendido para aprovechar la carne de conejo, que es igual o mejor que el pollo y el pescado. Los platillos regionales hechos a base de flora y fauna de la región, le permiten al visitante disfrutar de una amplia cocina centenaria, todo elaborado con productos cien por ciento naturales como el mole, los tamales, la flor de calabaza y mucho más.
De igual manera, pudimos disfrutar de las verdaderas obras de arte en artesa nías de alfarería, cuya elaboración está al nivel de las mejores del mundo y lo mejor es que las tenemos en la delegación municipal de Villa Progreso, en el municipio de Ezequiel Montes Querétaro. Obras de arte elaboradas a base de desperdicios de metales, es otro de los atractivos, al igual que los cuadros de paisajes y personas elaboradas con material reciclado, como los cartones de huevo y pedazos de madera, en fin, Villa Progreso hoy levanta la mano para que con sus habitantes, hombres y mujeres trabajadores y con una gran calidad artesanal, sea visitado todos los días de la semana y especialmente los sábados y domingos, para poder disfrutar en sus calles y el jardín principal, de todo lo que este gran pueblo ofrece a Querétaro, a México y el mundo.