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Canacintra busca ofrecer a sus socios, conocimientos y facilidades para reactivar las actividades empresariales lo antes posible

La Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) Delegación Querétaro, que preside Jorge Rivadeneyra, ha adoptado su responsabilidad social, aportando a sus afiliados y no afiliados, conocimientos para la reactivación de las empresas, dentro de un sistema de gestión de seguridad y salud ocupacional; señaló Gabriel Figueroa Uribe, Director General.

Al tiempo de asegurar que la Cámara velará siempre por los intereses del sector productivo, Figueroa Uribe apuntó que el posicionamiento de la Cámara es que, lo más pronto posible, se den las facilidades para la reactivación económica y por nuestra parte dijo, estamos llevando a las empresas los conocimientos como el Sistema de Gestión de Seguridad y Salud Ocupacional, porque será un tema importante en las próximas semanas.

“Nosotros estamos adoptando la responsabilidad social como Cámara y estamos promoviendo productos y servicios, procurando también que estos sean accesibles, considerando la situación financiera que por la que atraviesa el sector productivo”.

Durante la plática virtual “ISO 45000”, Francisco Fernández, representante de “Nodo de Innovación”, explicó que esta pandemia es un problema muy serio, por lo que las empresas tendrán que regresar a sus actividades, con un enfoque en salud ocupacional y gestión de riesgos: “en tiempos de COVID-19, el enfoque de derechos humanos, el enfoque de integridad y de responsabilidad social, van a ser ejes y por este motivo, la Canacintra los está impulsando tanto a nivel nacional como a nivel estatal, de ahí el objetivo de tener estos webinar, para redimensionar el liderazgo, la ética, la adaptabilidad de las empresas en un ambiente de crisis y que seamos más solidarios, más cooperativos entre patrones, trabajadores, clientes y proveedores, para salir de este ambiente de contingencia”.

Al hablar sobre el plan de contingencia sanitario en el contexto de los sistemas de gestión de seguridad y salud en el trabajo; Francisco Fernández invitó a las organizaciones a considerar la certificación como una palanca de innovación: “normalmente se ven como restricciones, como requisitos que hay que cumplir y que no aportan valor al proceso, cuando es todo lo contrario. Las normas ayudan precisamente a tener la base tecnológica, de tal suerte que este conocimiento le simplifica la vida a los profesionales en las organizaciones, para llevar una mejor gestión en todos los órdenes”.

Explicó que el objetivo de este curso es que en las empresas se apliquen las medidas que requieren las autoridades para reincorporarse a sus actividades, que cuenten con su cuaderno sanitario e informarle a la Canacintra que ya están cumpliendo con todas las medidas, a fin de que la Cámara, ayude en la gestión ante la autoridad, avalando qué empresas ya están listas para volver a trabajar bajo los protocolos establecidos.

Durante su presentación, apuntó que la situación de incertidumbre se vuelve un “cisne negro”; es decir, el caos toma todos los escenarios y se vuelve un escenario catastrófico; es así que, las organizaciones públicas, privadas y sociales, deben adaptar sus sistemas, reconfigurar todas las bases de planeación estratégica y situacional, ya que los sistemas de gestión han evolucionado y marcan un acervo para la adaptación y la reapertura escalonada de las operaciones.

“Estamos viviendo una resiliencia pandémica, viendo cómo el mundo se adapta y se recupera de esta contingencia; una resiliencia económica que genera crisis de oferta y demanda, además de un colapso financiero; aunado a la resiliencia industrial, del empleo y familiar”.

Francisco Fernández subrayó que ante una situación como la que estamos viviendo, los temas obligados en las instituciones son: derechos humanos, gobernanza de la organización, prácticas laborales, medio ambiente, prácticas justas de operación, rendición de cuentas, ética e integridad: “la integridad no sólo se refiere a corrupción, sino al liderazgo para hacer cumplir los objetivos de la empresa y sus valores; de tal manera que el Código de Ética será un instrumento fundamental en este regreso a las operaciones, después del COVID-19”.

Dentro del Plan de Contingencia Sanitario que deberán establecer, se encuentra la adaptación de las organizaciones y Pequeñas y Medianas Empresas, a la situación sanitaria, el establecimiento de fases y medidas de mitigación y control de la pandemia, el reenfoque de las operaciones y adaptación para operar como actividad esencial.

Finalmente, mencionó que en la implementación y operación del Sistema de Gestión de la Seguridad y Salud Ocupacional, resulta conveniente la definición de responsabilidades, de manera clara e involucrando a todos los niveles; el involucramiento de la alta dirección; la competencia y formación del personal involucrado en sus tareas; crear conciencia sobre la seguridad y salud en el trabajo y por supuesto, la comunicación.